«He llenado mi casa de todo aquello que un día me dio miedo; tres gatos, un insecto de hojalata, una mancha de sangre en el alféizar de la ventana, un paraguas abierto dibujado en la pared, la sombra del que fui proyectada cada noche junto a mi cama, y esa grieta que he decidido no tapar porque al otro lado escucho mi vida»